En reconocimiento a su importancia histórica, el Consejo Nacional de Educación estableció el 18 de mayo de 1935 como la fecha para rendir homenaje a la escarapela
El 13 de febrero de 1812, en la actual ciudad de Rosario, Manuel Belgrano solicitó al Primer Triunvirato la aprobación de una escarapela nacional con los colores blanco y azul celeste. Esta medida tenía como finalidad unificar a las tropas de las Provincias Unidas del Río de la Plata y diferenciarlas del ejército enemigo, que utilizaba el color rojo. El 18 de febrero de ese año, el Triunvirato aprobó y decretó el uso de la escarapela como insignia nacional.
Pocos días después, el 27 de febrero de 1812, Belgrano comunicó al Triunvirato: “Siendo preciso enarbolar la bandera, y no teniéndola, la mandé hacer celeste y blanca, conforme a los colores de la escarapela nacional” que él mismo había creado recientemente.
En nuestra escuela, nos enorgullece recordar y celebrar este símbolo patrio fundamental en la construcción de nuestra identidad nacional.
